El chef Luis Nara y el arte de las salsas y los ceviches (parte 1)
Algunos cocineros nacen con don y nos transportan, literalmente, a recordar sabores de familia o a otros países, y nuestras emociones se mueven con sólo ofrecer una “probadita” a nuestro paladar. Este don, aunado a ingenio y creatividad, lo tiene el chef Luis Nara, quien de visita en Madrid nos hizo recordar los sabores extraordinarios de Guanajuato.
Desde muy pequeño conoció los fogones al lado de su abuela María Luisa, a quien cariñosamente llama Licha.
En su juventud estudió en una de las universidades más importantes de gastronomía de la ciudad de San Francisco, California: Culinary Arts and Hospitality Studies. Trabajó en numerosos restaurantes de prestigio, como el restaurante Lorca, Nirvana, Alma Fresca y en el Hotel Le Meridien, de la cadena Starwoods, entre otros.
Las combinaciones que hace en sus salsas es la característica más innovadora del chef Nara, por ejemplo, incluye en ellas cajeta (dulce de leche), o chiles frescos y secos con fruta, y sigue cuidadosamente al detalle el tiempo de maceración.
¿Y qué decir de sus ceviches y aguachiles*? Viajando a otros países ha perfeccionado su técnica basada en pescados y mariscos. Su sangre, sinaloense y guanajuatense, lleva amor, pasión y respeto por la cocina, por todos y cada uno de los fogones, por muy remotos que se encuentren.
Si tienes oportunidad, acércate por éste su “templo” de salsas y de buen comer: restaurante CRUDO Urban Seafood, en Celaya, Guanajuato, y Azul Madera, en Cabo San Lucas, Baja California Sur, México.
*El aguachile es un plato creado en Sinaloa y que se consume principalmente en la costa norte del Pacífico mexicano. Los principales ingredientes son camarones (gambas) crudos que se maceran en limón, chile, sal y cebolla, y se les agrega pepino o fruta.